¿Qué hace un catalán en paro en un pueblecito a 100 km de donde Buda perdió la sandalia?

He llegado aquí para colaborar con ASSIST, una ONG india que ayuda a las comunidades rurales desde su base, y, por qué no, también para conocer la cultura del país, ver su situación y viajar un poco. Lo demás ya vendrá...

Si queréis consultar la web de la ONG:

www.assist.org.in

En la sección About us/Strategy os podéis hacer una idea aproximada de cómo trabajan.

¡Bienvenidos!


Seguidores

Datos personales

Chilakaluripet, Guntur District, Andra Pradesh, India

Entradas populares

viernes, 15 de abril de 2011

Eventos varios

            Mañana viene mi Terezinha y nos vamos de viajecito, así que que, para los que no podáis estar dos semanas sin leer una entrada nueva del blog (quién sabe, puede que haya alguno), os escribo una síntesis de los últimos eventos, que han sido más o menos curiosos pero tampoco han tenido excesiva "chicha".


Celebración del año nuevo telugu

El 4 de abril se celebró en el recinto de ASSIST el fin de año telugu, para lo cual se instaló un escenario en el recinto de la ONG. Por mi parte, a instancias de Murali, yo también me engalané con mis mejores galas indias, como podéis ver en la foto.
            Vino mucha gente, tanto de la ciudad como colaboradores de ASSIST y personal. La celebración fue amenizada por bailes de niños de un colegio de ASSIST, por alumnos de un centro de enseñanza vocacional y por miembros de Melukolupu, la compañía profesional de la ONG que se usa para los programas de concienciación en los pueblos.
También vino invitado un escritor que aleccionaba al público sobre diversos temas, intercalándolo con chistes. Por supuesto, todo en telugu. Afortunadamente a mi lado se sentó un cura (indio, por supuesto) que hablaba inglés y que me contó el significado de algunos de los actos y rituales. Por cierto que no tomé ni una foto, había un chico que estaba filmando con el vídeo y me dijo que él podía tomar las fotos… Así que como tampoco era el evento que más quisiera fotografiar del mundo le dejé (además, con todo el público que había tampoco quedaba bien que yo, como invitado de honor extranjero, estuviera haciendo fotos todo el rato por en medio).






 Después del tiempo que llevo aquí, finalmente he llegado a la conclusión de que, cuando te cubren con floripondios y te tiran flores por encima no es ningún intento de asesinato ritual, sino que se trata de una demostración de afecto o respeto, y que el afecto o respeto mostrado es proporcional a la cantidad de floripondios y flores que te tiran por encima, lo cual quiere decir que cuanto más cubierto y enterrado estés bajo ellos y menos puedas respirar, más te admira la gente y más querido eres por la comunidad.

Cumpleaños del director.






Al día siguiente era el cumpleaños del director de la ONG, por lo que hubo un acto por la mañana con personal de la ONG y algunos invitados. De hecho fue una celebración con bastante pompa, con pastel, discursos varios y regalos incluidos. El momento surrealista fue cuando los empleados sacaron una megaguirnalda de flores y se la pusieron al director y a su mujer. 





Cumpleaños de la nieta de los directores. 

Hace poco me enteré de que los dos directores “top” tienen una nieta común, ya que el hijo de uno y la hija del otro están casados. Aquí cuando los niños cumplen un año se celebra a lo grande, tipo bautizo. Cuando me invitaron pensé que se trataba de una cena familiar en casa del director con los compañeros del trabajo, pero cuando llegamos allí se trataba de un sitio enorme, rollo boda, con aperitivo y más tarde cena incluidos. Una vez más, en la celebración hombres y mujeres (estas con niños) estaban segregados: los hombres en el exterior y las mujeres dentro, en la sala de celebraciones. Además, ninguno de mis compañeros me presentó a su mujer, como mucho alguno me la señaló en la distancia…






Segundo finde en Chirala
El fin de semana pasado (es decir, sábado noche y domingo) volví a ir a Chirala. El sábado por la noche el Murali de llí montó una cenita en la casa de invitados donde me alojé (aún no sé si en mi honor o usándome como excusa), y para variar no escatimaron esfuerzos en tratar de cebarme y emborracharme, lo cual por suerte sólo consiguieron a medias. Su táctica sibilina consiste en ponerte un plato de comida que, cuando no es demasiado picante, está muy buena (y además carne y/o pescado, a los cuales no tengo acceso normalmente y que por lo tanto me motivan enormemente), con lo cual ya tienes tendencia a hincharte. Al cabo de un rato de terminar, sin decirte nada te ponen un plato de otra cosa, y así sucesivamente. Con la cerveza, viene a ser lo mismo. Y eso que no me gusta mucho… Si lo llego a saber, el primer día les digo que soy musulmán y que no bebo.
La mañana siguiente fuimos a la playa, pero esta vez fui equipado, y tras beber la cerveza de rigor (luego me negué a beber más, emborracharme en la playa hubiera sido un recuerdo demasiado patético) y comer un poco pude bañarme. Por cierto, no me extraña que aquí los hombres tengan casi todos su curva de la felicidad, no paran de comer ni beber cerveza y siempre que pueden evitan cualquier tipo de esfuerzo físico, incluido el estar de pie.
        Para quien no lo sepa, aquí ciertas demostraciones de amistad entre hombres están bien vistas, como cogerse de la mano o rodear los hombros del otro. Resulta curioso y un poco chocante cuando lo ves, y sobre todo puede llevarte a situaciones que, en el contexto de nuestro país, podrían conducir a equívoco, como pasear cogido de la mano de un tío de 50 años o formar parte de un círculo de cuatro tíos  con bigote y barriga, cogidos de las manos, que dan saltitos para saltar olas en la playa. No me siento del todo cómodo en ellas y por suerte sólo me ha ocurrido un par de veces, pero por otra parte en este contexto sabes que es natural y por lo tanto lo aceptas.
Como ya es habitual, la gente que había por ahí se interesó por mí, sobre todo los niños, que vendían un tipo de frutas exóticas con una especie de gelatina y jugo por dentro. Lo cual aproveché para hacerles algunas fotos, con las que quedaron la mar de felices sólo con visualizarlas en la pantalla. No sé si soy yo o simplemente me parecen exóticos, pero encuentro increíbles las miradas y expresiones que tienen algunos de estos niños… Decidme si os pasa lo mismo…







Visita al festival en Chilakaluripet
Ayer me montaron una visita improvisada y volví a ir con Sameer, el encargado de informática, a la ciudad. Había un festival religioso, el Sri Rama Navami, con lo cual había una calle decorada donde se habían instalado mini-templitos. Algunas partes estaban muy abarrotadas y eran un poco agobiantes, pero era muy curioso ver el colorido imperante, las figuras de los dioses, las luces de colores hechas con fluorescentes (aquí todas las luces van a base de fluorescentes, hasta las de la calle, no hay farolas)…





Y para despedirme, un par de fotos extra... Y otra de un trabajador indio abnegado. ¡Hasta pronto!


5 comentarios:

  1. EL amoooooooooooooooor!!!!!!! Recuerdos a Terezinha!

    ResponderEliminar
  2. Jeje, ok, se los daré, pero tendrás que decirme quién eres... ;)

    ResponderEliminar
  3. Ah vale, ya lo he visto RP.

    Petons guapaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!

    ResponderEliminar
  4. Aquí quan estan de festa tot és "a lo grande", no? Pel que expliques dels "manjars" i les fotos de les decoracions...

    ResponderEliminar
  5. Sí, la gent es deixa una pasta, però bé, cal dir que la festa de la nena la van pagar els dos avis que estan ultraforrats, la gent normal no té pasta per pagar una cosa així ni de conya...

    ResponderEliminar